«Lo que he escrito, escrito está. Podemos destruir lo que hemos escrito, pero no podemos borrarlo». «La naranja mecánica» (1962), Anthony Burgess.

«Hemos pasado de un mundo muy jerarquizado donde la comunicación entre nosotros era muy difícil a un mundo donde de repente, gracias a la era digital, nos comunicamos los unos con los otros a toda velocidad, estamos muy cerca, nos enriquecemos muchísimo porque ya no hacen falta grandes esfuerzos». Elsa Punset.

El WhatsApp ha entrado en nuestras vidas de una manera generalizada. Nos facilita la interacción e intercambio de información a tiempo real. Es un forma sencilla y rápida de estar conectado con amigos, familias, compañeros de trabajo, vecinos, servicios. Nos conecta con personas de todas partes del mundo. Nos ayuda organizar encuentros, reuniones, avisar de algo, compartir un momento a través de una foto, una canción, un chiste, un video…

Es una aplicación útil, rápida y hay que aprender a utilizarla. También puede tener  efectos negativos en las relaciones. No olvidar que detrás del móvil se encuentra una persona. No lo sustituyas por una llamada de teléfono, ni lo remplaces por buscar el momento para quedar y veros. Busca  la comunicación directa con la persona, para contarle tus alegrías y penas, y poder compartir .

Es una aplicación que nos ha aportado una nueva forma de comunicación y nos ha traído muchas ventajas en las relaciones y también desventajas si no lo utilizamos con inteligencia. Es un medio donde pueden producirse malos entendidos y enfados innecesarios con otra personas. Crea también gran dependencia, ansiedad y nos puede aislar del contacto real con el otro.

La comunicación escrita pierde un 70% de la información. Se pierde toda la comunicación no verbal, tan importante para poder entendernos con la otra persona. Perdemos el tono de voz, el gesto, la postura corporal, la mirada. Perdemos la verdadera intención del otro con lo que nos esta intentando trasmitir. No sabemos el estado emocional del otro.

Gracias a los emoticonos se mejora algo el sentido que se quiere dar a la conversación, aunque estos también pueden ser otro elemento de malos entendidos.

Hay que poner atención a lo que escribimos, poner consciencia en las palabras que se utilizan, ser muy cuidadoso y respetuoso con ello. El simple hecho de poner una coma mal puesta puede cambiar el significado de lo que se quiere trasmitir. Recuerda además que las palabras se quedarán ahí plasmadas para leerlas una y otra vez, no van a desaparecer.

Es un medio que nos lleva a la impulsividad, se escribe rápido y se envía , quizá sin haber reflexionado aquello que estamos trasmitiendo, y que al otro le puede llegar en un momento no adecuado creando malestar , tensiones y discusiones innecesarias.

También nos puede a llevar obsesivamente a controlar al otro, invadirlo , creando desconfianza y pensamientos erróneos. Podemos llegar incluso a agobiar a la otra persona, creando la exigencia de que te contesten inmediatamente. Se responsable de como utilizas esta herramienta. Trata con respeto y consideración a tus contactos, amistades, pareja, familiares.

La comunicación a través del WhatsApp puede hacer que pierdas amistades y relaciones por la mala interpretación de un mensaje. Intenta no utilizar este medio cuando estés en un conflicto, desacuerdo o riña con  otra persona, será difícil llegar a entenderse por este canal , llama  por teléfono o mejor aun, queda con esa persona. Cuando quieras tratar un asunto importante elige contactar cara a cara con la otra persona.

Es una vía difícil para expresar emociones y sentimientos al otro, y poder entenderlas, comprenderlas y empatizar con lo que nos están intentando trasmitir. No siempre nuestro mensaje va a ser interpretado como queremos. Será preferible estar frente a frente con tu familiar, amigo, pareja… para que tu intención y mensaje llegue .

A veces lo utilizamos erróneamente como un medio para expresar lo que no nos atrevemos a decir en persona, nos escondemos detrás de la aplicación. Atrévete a explicarte a través de un encuentro, un café, una conversación mirando a la otra persona.

Que este medio de comunicación, no se convierta en tu vida, en un sustituto de un contacto real con otras personas. Un abrazo , una mirada, una sonrisa, escuchar el tono de voz, secar una lágrima, siempre será mas satisfactorio y cercano,  que un mensaje de texto.